"Estoy convencido de que tiene que haber otro derrotero sin llegar al desmadre para leer un libro en una biblioteca pública".
Si usted hastiado quiere provocar sus peores instintos y se le ocurre comprar trapos en las rebajas de verano de las mejores traperías... por el simple impulso morboso de atiborrar su fondo de armario... ¿Sí? O curiosear en la más degradante miseria de la condición humana, o saber con precisión absoluta por qué el blanco no se parece al negro, o averiguar de una vez por todas las consecuencias del silencio en el lecho de muerte, no se ande por las ramas, no pregunte a la vecina chismosa, no pierda el tiempo consultando su enciclopedia. No se preocupe en vano. Simplemente, haga "clic" en su televisor de pantalla full y vea la tarde de comadreo en todas las cadenas. (Advertencia: si sale indemne de la prueba, o sea, si soporta una tarde de tele chismorreo y no se convierte en un majareta normal, no pida cita a la dama que no me deja ir, lea un libro). Gracias.
No se vaya: se imagina a la hora de la siesta viendo la tele que le llegue la muerte y la tele siga encendida... Qué plañidera.
Hola tú
ResponderEliminarNo sé me hubiese ocurrido nunca morir frente al televisor. El mejor lugar es en la cama . Igual que cuando nací. Sería bueno morir cuando aparece el letrero de "el video se está repprodducienxlo ¿Quiere seguir viendo? Y se oiga el silencio o a mi pájara "Sabiina" "diciendo ",cotorra, torra torrra tortra". Sería fenomenal ... o no.
Va un beso cruzando el mar 😘
Hola tú también.
ResponderEliminarMe preocupas. A veces quieres morir en paz y sentarte a la diestra o a la siniestra de tu Dios y ahora me das a entender que no te parece tan mal morirte frente al televisor con el Sabina y una cotorra de plañideras... Créeme, la tele de chismorreo la mejor plañidera. Me preocupas. Aunque confiesas que para mejor morir en la cama. Y pregunto: ¿Con Enrique en la cama? ¿Qué pasó con Enrique? De siempre te dije que no era de fiar. Disculpa, Me tengo que ir, estamos de fiestas y las campanas repican y llego tarde y hoy me toca a mí llevarlo a hombros. Creo. Te quiero. Beso.
Salud.
N´ombre, no te preocupes, para los mexicanos, la muerte es tan cotidiana como la vida en nuestras manos-
ResponderEliminarNo, no, no. No dije Ël Sabina¨dije ¨Sabina¨, mi cotorrita llamada así. ¨Sabina¨. ella es como yo, chiquita, escandalosa, enojona, solitaria como yo.
Enrique se ha ido. He leído sobre la letra de sus canciones, copia burda, pertenecientes a otros., enigüey, ay dont quer.
beso de musa durmiente.
Vivís un tragedia. "La muerte es tan cotidiana como la vida en nuestras manos". Lo siento. Beso.
ResponderEliminarSalud.