"Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta". (Pío Baroja).
Qué triste que a estas alturas del desespero te des cuenta que nos hace daño quien nos quiere. (Quien nos quiere, no quien nos quiso y nos sigue queriendo con perdón). Claro, ni que tenga miedo a salir de casa... Creo que has dado en loco y que ya te has ido. Desdeñar el amor no es sano para el alma. Te hiciste daño y dale: acabarás haciéndote el harakiri. El trabajo se deja en la oficina. Aunque nos queda el Serrat: "Hoy puede ser un gran día, plantéatelo así, aprovecharlo o que pase de largo depende en parte de ti". Lo que va a suceder hazlo tuyo porque sucederá quieras o no. ¡Sálvate!. No valen disculpas. ¿Comprendes? Realmente estás sola y Maquiavelo no te salvará. Pierdes el tiempo que no tienes. Y a pesar de las cartitas de quinceañeros enamorados que lees cada día en de soslayo (quien calla es porque quiere), sigues con comportamientos insensatos. (Lo tuyo es querer, querer o hacerse querer, lo de otros dejarse querer, que es otra manera de querer). Gracias.
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