El humano ser, después de nacer debe siguir naciendo... Lo que quiero decir es que después de nacer hay que darle utilidad a ese hecho. Después de nacer hay que ser capaz de armar un proyecto de vida. Y vivir.
Se diría que muchos viven, pero no existen, actúan, pero no trascienden, tienen, pero no disfrutan, comparten pero no aman, rezan, pero no creen. Para vivir bien, hay que pensar bien y se tiene que armonizar el estado de la conciencia. ¡Joder, dona, hablo y acabo haciéndome preguntas como si fuera el circuito cerrado de la confusión!. Se puede decir que lo cotidiano está lleno de limitaciones que traban la existencia a cualquiera.
El caso es que aquellos y aquellas que no hayan aprendido de manera funcional y sabia a manejar sus propias limitaciones, sus carencias y sus debilidades y sus vacíos existenciales son carne de psiquiatra.
En fin, no quiero ponerme trascendental, solo pretendo explicar que hay que estar atento a las variantes que la vida propicia y que debemos aprender a valernos por nosotros mismos. Pero si algún día caemos en la tentación de visitar al psiquiatra, no debemos compartir la razón de nuestra voluntad. Llevan tanto tiempo intentando adivinar su función, que sencillamente creo que, llegado el caso, no sabrían dónde ajustar la soga.
Los psiquiatras nada saben de la conducta humana ni siquiera saben cómo resolver sus vacíos existenciales, si lo sabré yo que camino en los linderos de la locura en la que ellos no tienen cabida.
ResponderEliminarCreo que eso fue lo que quisiste decir ¿no? Blah para qué te pregunto si no me contestas. Como diría un amigo, hablo con la pared.
Igual seguiré pasando todos los días, hasta que te canses de mi y dejes de aplicarme la ley del hielo.
ResponderEliminar¿Ya fuiste a misa?
Chido.
Estés muy filosófico...
ResponderEliminarBesos.