jueves, 28 de noviembre de 2024

De mal en peor.

Sé que pierdo mi inestimable tiempo con lo que voy a pedir, pero de todos modos llamo la atención a quien se quiera dar por aludido de que las cosas van de mal en peor. Entiéndase que las cosas van de mal en peor como una expresión que explica sin ningún género de dudas cómo un problema va empeorando gradualmente sin que se vea una solución cercana. Lástima. Es decir, y a quien se quiera dar aludido: nunca persona conocida más torpe de entendederas. Oiga usted, las cosas van de mal en peor sin indicios de mejora alguna. Conmino que de una vez por todas pase de las palabras a los hechos y actúe en consecuencia con todos los recursos necesarios para castigar la mala praxis sin ninguna contemplación, y los responsables, en los que se incluye por pasotismo, por dormir el ensueño del yoquepierdismo... Joder, dona, no aprenderá, le cae la casa encina y no se entera. Como si el pueblo estuviera necesitado de mártires, santos, vírgenes y bellas durmientes. Acabará haciéndose el harakiri, o yéndose si se quiere dar por aludido por no saber organizar un simple quehacer. Ojo al dato: Marca un horario laboral y carece de personal laboral, y, como si fuera una obra social, el más listo de la clase le aconseja de casa traer voluntarios para cumplir el organigrama. No tiene cabeza ni intrepidez para enfrentarse al problema que le generan los nuestros. (No hablo de política, tampoco de amor, hablo de cultura, la cultura del pueblo y de llegar a final de mes). Gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario