Y si los que nos queremos nos habláramos... Joder, dona, sería maravilloso, por no decir imposible. "... y devolver tu nombre a mi lista de contactos preferidos, y tus cuerdas vocales a la mías, y nombrarte. Nombrarte a plena luz del día. Pero tu boca entumecida no se alimenta de palabras, sino de silencios. ¿Por qué? Tú tienes tus motivos y yo tengo los míos. ¿Dejaremos que nuestros motivos nos separen para siempre? Y si al margen de nuestros motivos consideramos la realidad de las cosas. Cosas tuyas, cosas mías, solamente cosas nuestras. Sin olvidar tu mirada y la mía en la penumbra con tu brazo a punto de abrazarme y mi beso a punto de besarte. ¿Por qué tu callada respuesta? ¿Por qué mi palabra entrelíneas con renglones tan retorcidos? ¿Qué nos impide cantarnos la realidad de las cosas? Confidente amiga, confidente amigo. Amiga, amigo, hasta el delirio y la desesperación. Nos separa la verdad. Mentiras de otros tiempos y otra vida. ¿Seremos capaces de dejar morir aquello que el amor creo? Sin ataduras alcemos libre el vuelo hacia la verdad. La verdad". (Amanecerá algún día). Gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario