viernes, 2 de junio de 2023

Esperando (sin prisa).

"No hay grito de dolor que en lo futuro no tenga al fin por eco una alegría". (Ramón de Campoamor).  

"A los que aman al Señor todas las cosas ayudan a bien". (Romanos 8:28-30). ¿Solo por amar al Señor las cosas ayudan a bien? Las cosas no ayudan a bien, pues el mal existe (tengo pruebas y son irrebatibles) y no ayudan a bien. Creo, sin entrar en polémicas, que a los agnósticos nos convence más la sabiduría del pueblo, que tal vez viene a ser lo mismo: "No hay mal que por bien no venga". Es hora entonces de aprender de los errores, porque nadie se quejará de la circunstancia que vive si aprende y hace suya la sabiduría que ella desprende... La victoria no se alcanza sin perder varias batallas. Nunca se llegó lejos sin dejar algo bueno atrás. Nada se gana sin dolor, sin arrojo, sin compromiso. La mayoría de las personas se marcan un propósito en la vida y lo siguen. A veces lo alcanzan, o se adaptan y siguen. Yo, cómo no tengo talento natural, no sigo y me quedo. Me quedo esperando, porque "no hay grito de dolor que en lo futuro no tenga al fin por eco una alegría". Gracias.

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