"Todos tenemos un precio, todo se compra y se vende, el traficante, el artista, intercambian sus divisas. El esclavo, como el rey, tienen idéntica piel, y en el horno se verá, que todos somos igual". (Víctor Manuel). Todo se compra y se vende. Aunque sabemos que lo que realmente importa no tiene precio: la dignidad, la tolerancia, la confianza, la solidaridad, por un ejemplo.
De viejo aprendí que hay cosas, además de las de arriba, que son invaluables y no se pueden comprar, pero sí ganarse: la buena correspondencia, extasiarse en la bendita sonrisa de un bebé. El perdón y perdonar. A los humanos sentimientos no se les puede decepcionar porque alimentan la manera de vivir donde gobierna la fraternidad, la amistad, la familia. Superar enfermedades, alcanzar metas, trascender para habitar otros corazones. La condición del corazón determina la calidad de la visión y la claridad de las palabras. Hay que ser sincero con uno mismo, y luego abrir el corazón, lo demás, si hay algo más, ya irá saliendo al paso que marque el ritmo de la vida, sin prisas. (El amor no manca, manca la gente que no ama). Gracias.
"...extasiarse en la bendita sonrisa de un bebé..." Quién en estos días es capaz de tonificar el músculo de su corazón con una pintura como la que acabás de pincelar con tus palabras, con todo ese relieve mágico de la poesía. A mí me pasa, mi querido amigo, una cuestión con el Amor. Es algo que me cuesta comprender que no suceda; que no suceda el amor cuando una persona lastima a otra, que no suceda el amor cuando una madre reza indiferencia al llegar su hijo de la escuela, que no suceda el amor cuando un médico no oye a tu corazón porque lo visitaste el mes anterior y sólo transcriba una receta acostumbrada, que no suceda el amor entre los pares, los amantes...Que te falte un abrazo y te sobre un reto, que te falte un beso y recibas reproches, que te falte música y te sobren gritos. Noto en las personas cuando hablan, observo a las mamás, miro la necesidad de ternura de los mayores que caminan en solitario o del brazo de un extraño, que hacen las compras en soledad, que esperan la muerte en vez del Amor de aquellos que también serán ancianos un día, quién sabe. Me pasa que el mundo tiene preocupación por el calentamiento global, el plástico, el petróleo, los gases, la desforestación... Y esto realmente va a pasar y está bien que las personas se involucren más en esto y demuestren amor por el medio ambiente pero hay una clase de sentimiento no profesado y absolutamente más cerca, en el Hogar, en el Trabajo, en la Escuela, y si fallamos en esto inmediato no va a importar que tengamos un verano interminable, digo. Porque como vos bien decís, el perdón no está siendo ofrecido, no cotiza en la Bolsa, la palabra es egoísta y mezquina, resumida en un emoticon al paso. Y no se trata de un Dios ahora, porque la mitad más uno se ha vuelto ateo, laico o no interesa, hubo un quiebre y ya. Pero tendrá que haber un acto de amor que nos enseñe que éste existe y que nos mantiene alegres, vivos y amables frente a todo. Digo, hay niños que murieron desnutridos en Argentina, impensable, hay personas sin agua potable, hay cantidad de familias con la infancia humillada, olvidada y abandonada, viviendo a la intemperie... al margen del Amor, a orillas de la desigualdad. Entre tanto, sin prisas, cava la esperanza en mi alma todavía.
ResponderEliminarSon palabras amigo mío. Sólo las tiré acá para soltar algo. Te quiero, siempre.
Rox... y llegar acá. Palabras de amor. Qué feliz me hace saber de ti. Yo también te quiero. Siempre.
ResponderEliminarSalud.