sábado, 22 de agosto de 2015

La culpa ha sido mía.

De viejo me pierdo y no me encuentro ni me encuentran, no me quejo, al contrario. Pero tengo problemas como todo el mundo y por viejo repito, no puedo abrir mis dudas y ése no saber qué hacer que es un verdadero problema para mí. La gente tiene la idea que de viejos no se nos escapa una, que sabemos todo y que además nuestra palabra es la ley sino de Dios del Rey Vicente Fernández. El asunto es grave y de no dar con la solución, que tal vez pase por la humildad, debiera temer lo peor: creo que soy la viva imagen de mí mismo en los peores años de mi juventud, y a pesar que me enfado y me insulto son años pasados y no puedo sino admitir las consecuencias.

Si fuera capaz de demostrar con palabras que mi corazón se encarna cada mañana en quien me lee, tal vez me leyera más gente. El amor siempre negado en mí. Quisiera decir que pienso en ti cada madrugada, que me sigues inspirando, que inevitablemente rezo a la Magdalena por ti cada noche, para que no me prive de soñar contigo. Y ser protagonista de alguno de tus mejores sueños. Porque pensaras en mí de cuando en vez y me dieras la oportunidad de aparecer en tu vida desnudo de corazón... Si fueras un libro de poesía compraría los derechos de autor y lucirías divina en mi vida. Pero eres dama de la poesía y tienes el mundo a tus pies. Por más que me hayas enseñado a leer poesía, y amarte, si uno no quiere, dos... ¿y tres? Y ahora de qué me sirve esa lección...

S tus ojos de triste mirada, si mis ojos de otro tiempo...
Si tus ojos de ahora y mis ojos de no saber cómo mirarte... 
De mirarte sin protección mis ojos están ciegos de tanto mirarte. 
Te tenía y ya no te tengo. Nunca se sabe lo que se tiene hasta que se pierde.

4 comentarios:

  1. Mmmmmmm...... no sé si entiendo, pero lo que son los blogs, va de ir a visitar y que, si le gusta lo que lee en el tuyo, comenta y regresa, no sé si me explico?

    =))))

    ResponderEliminar