domingo, 23 de agosto de 2015

¿A quién importa la verdad?

"A mí, hace muchos años ya, sí que me robaron un beso y no me dejé, ni la vi venir".

Una amiga me explica de manera clara que, o cuelgo lo de arriba en horario de máxima audiencia, o me lleva ante los tribunales de justicia por mentir descaradamente. No quiero jaleos con nadie y menos con una amiga. Lo cuelgo y que la máxima audiencia decida su horario.

Fue días atrás cuando escribí que a una mujer nadie le roba un beso, se lo deja robar. Lo digo y no lo mantengo si es lo que quiere una amiga, pero no le pediré perdón por escribir mi verdad... Si mentira allá cada cual. La verdad no importa o está sobrevalorada. Alguien cree que Aznar habla catalán en la intimidad o que Zapatero no bajó las pensiones al no subirlas sin considerar la inflación o que la industria que más dinero ganó con Rajoy fue la que pinta rayas rojas. ¿Y de las próximas elecciones qué? ¿Cuando nuestra clase dirigente aparezca con la cara humilde de ir a misa los domingos y nos hable de un país maravilloso con una Alicia bella en cada esquina lo creemos y amén? ¿Y el fúrtbol ¡Dios mío! del fúrtbol qué me dicen? Me cuentan que un tal Sergio Ramos por 10 millones de euros anuales netos juró ante notario amor eterno a un club. ¿Y quién no por diez millones de euros? Por un beso robado o no jurar amor eterno sin un poco de poesía rondando los corazones igual no, pero si ese amor se llama 10 millones de euros libres de impuestos con poesía rondando los corazones o no sí. Con la Biblia en las manos, y por esa cantidad indecente de dinero, hasta yo prometería amor eterno a Shakira, incluso a Piqué. ¡Venga ya!. Con perdón.

1 comentario:

  1. Vaya!

    ahora entiendo.....!

    lo mío era broma, nada que ver con todo eso.

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