"Es verdad que un reloj despertador sirve para escuchar el paso del tiempo. Las horas tocan en la puerta del sueño y nos dicen que hay que levantarse y ponerse en marcha camino de la oficina, de una estación de tren o de un aeropuerto. La poesía tiene en su oficio de escuchar algo de despertador, aunque sus avisos nos ponen en camino de la conciencia y la rebeldía ante las injusticias del olvido, es decir, hacia las oficinas del propio yo o del nosotros". (Luis García Montero, poeta).
Escucho un acorde inofensivo y de pronto recibe un impacto mortal, pienso que será un misil ruso, de Rusia a Ucrania, que se fugó con el viento de levante, como el globo chino que llegó a las Américas. Lo que sube baja, sea un misil, un globo o un alma en pena. Mi yo inmaterial no está dotado de razón. Siempre fui así, aunque no siempre supe que fui así. Todos somos así, nacemos inocentes y luego hasta que el cuerpo aguante. Siempre hacia delante. Vivimos una conspiración de Dios. Yo la vivo de dos. Dios y dos se llevan la gloria de la próxima victoria. Soñé que mi nombre había sido elegido para encabezar la victoria del tiempo, pero no sonó el reloj despertador que sirve para escuchar el paso del tiempo y estoy muerto. Gracias.
Nooo!!! cómo vas a estar muerto, si tú despertador no ha sonado , lo q ocurre es q te has quedado adormilado, nada más. Los pobres muertos están en Siria y Turquía, a ellos el despertador se los ha tragado : (
ResponderEliminarMuchos besos !
María, hay temas que no me atrevo a tratar. Qué tragedia. Y Siria, con 500.000 muertos en una guerra civil interminable, ahora, callados los pueblos del mundo... Un poco hipócritas somos. Demasiado. Dices que me repito más que la morcilla de mi tierra, pero los que siempre pierden siguen perdiendo... Otro descuido de Dios y María. Gracias. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Pues sí, la verdad es que tienes razón, un poco/mucho hipócritas somos, pero es que de tanto muerto y tanta guerra por todos lados, uno ya pierde la cuenta y no sabe para donde mirar : (
ResponderEliminarLo siento, todos lo sentimos, pero hay que seguir. Gracias, María. Beso.
ResponderEliminarSalud.