Desde el día que supe que los errores sirven para aprender, porque de los errores también se aprende, firmé la paz (sí uno no quiere dos no pelean). Aprender a desaprender. Y volver a pelear puesto que apareció Borges (un poeta nunca miente):
"Si pudiera vivir nuevamente mi vida, en la próxima trataría de cometer más errores. No intentaría ser perfecto, me relajaría. Sería más tonto de lo que he sido, de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad. Sería menos higiénico. Correría más riesgos, contemplaría más atardeceres. Iría a lugares adonde nunca he ido, tendría más problemas reales y menos ficticios. Yo fui una de esas personas que vivió sensata y prolíficamente cada minuto de su vida; claro que tuve momentos de alegría. Aunque si pudiera volver atrás trataría de tener solamente buenos momentos. Pero tengo 85 años... Y me estoy muriendo".
Los errores enseñan, y los aciertos y los ejemplos si uno pone atención. La vida enseña lo que no está escrito sin tener que volver atrás. Se trata de aprender a desaprender o viceversa antes de morir y tener solamente buenos momentos. Gracias.
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