"Si nada nos salva de la muerte, al menos que el amor nos salve de la vida". (Pablo Neruda).
A algunos les bastan los hechos impactantes, las profecías cumplidas, o los peores augurios llenos de certezas. Los golpes que da la vida ponen al desnudo la realidad en la que todos los días nos jugamos la existencia. Y cómo duele. ¡Implacables peregrinos: el pueblo de Patricia llora su dolor!. Dani, el amigo del alma de Adri ha muerto, y Adri no está en la tierra, está en el firmamento donde le puso su nombre a una estrella para que guie sus pasos. Patricia nada sabe y Adrián no está. Todo lo malo viene causado por algo que ya era malo y no sabemos qué tan malo era. Al tiempo. El tiempo que ahora nutrirá su luz. -¿Dónde está Adri? -Está con Dani en la terraza: llevan horas. Bajarán a cenar o a desayunar... O cuando gane el Valencia.
Un esposo, un padre, un amigo. Dani ha muerto y Marta, su esposa, ¡joder, su esposa!. Y sus hijos y sus padres. Un pueblo.
Lo dejo. Feliz 2021 a los que están y memoria a los que faltan. Entre mis días elegiré uno para que de soslayo no pare, que siga escribiendo los días, que no se detenga. Si ustedes quieren nos volvemos a ver el próximo año. Mucha salud. Gracias.
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