Imagina.

Una amiga me dijo que leyendo un libro se acordó de mí... Una amiga me vincula con un libro y eso para mí, aunque sea un libro de autoayuda, es un halago. Que una amiga leyendo un libro se acuerde de mí y me lo diga es de lo más hermoso que han oído mis oídos en años. Quisiera vivir en ella pero sabiendo lo que sabemos es imposible. Los libros y las amigas, unos y otras y si además llevan poesía en su interior, ay. Cada suspiro. Porque aprendieras a leerme (aunque leyeras mil veces y mil el mismo día aprenderías a leerme) y me echaras en falta... aunque fuera como recurso literario, como disculpa para que vuelvas a mí a pesar de la palabra y la memoria, los años y la distancia. Imagina poder coincidir en un espacio del universo libre de ruido. Imagina que me dejaras esperarte en Les Seniaes. Los años no perdonan y me mareo solo con pensar coger el bus. Los años no perdonan y me nublan el juicio. Quieras o no te espero en Les Seniaes. (Ojalá y que nunca tengas que arrepentirte por las consecuencias de lo que hiciste. Lo que no hiciste solo perjudica tus aspiraciones de tu futuro). Gracias.