Demasiadas vidas para aclararme.

De haber nacido en otro lugar y en otra vida, y de poder elegir, me hubiera gustado ser diferente, por un decir: "asturiano en Asturias", "Al Capone en Chicago", "legionario en Melilla", "pintor en Ibiza", "mercader en Damasco", "costalero en Sevilla", "sultán en un harén", "ganador de la feria", "gitano en Jerez", "vecino de Flor de María". Poeta, ay, poeta, ahora que sé que puedo amar... que sé que te amo. Pero he de vivir esta vida porque aquí y ahora no puedo elegir otra, además, soy el güelu más afortunado que conozco. Me gusta vivir el momento (carpe diem literato) y escribir el día que me gusta vivir en la noche desvelada bajo tu cuerpo. También una opinión o un sentimiento de amor entrelíneas donde nadie me fiara como ayer, ni me quisiera como me quisiste. ¡Joder, dona, he vivido demasiadas vidas para aclararme!. Y tanto es así que ni siquiera sé cómo he llegado hasta aquí suspendido como una gota de rocío a una flor de azahar en Les Seniaes. Ni qué fin persigo. (Seguiré escribiendo el día mientras me leas y me ames y te ame... Pero recuerda, la puerta lleva mi nombre y está abierta). Gracias.