Se escribirá un día no lejano.

Se puede, sí se puede. Entonces los políticos reaccionan cuando la sociedad reacciona. Una sociedad comienza a militar y eso me hace concebir que no todo está perdido. Resulta realmente bochornoso que los dueños de los partidos políticos no se comprometan con solucionar las verdaderas necesidades del pueblo. La realidad que vive el país es insostenible. Hablo de voluntad política, porque el pueblo pasa hambre de pan y justicia. Igualdad. Y a la cárcel los corruptos y sus corruptores. 

Pero y qué gracia, mi mente absurda no recuerda cuáles son las verdaderas necesidades del pueblo y los medios anuncian que el BCI de la canciller Ángela Merkel a finales de año cerrará el grifo a los bancos y subirán los tipos de interés y volverá la inflación y el IPC, ay, el IPC ¿Qué hay de lo mío que es lo de muchos? El caso es que nos hemos vuelto a endeudar y los pensionistas no tenemos claro si actualizarán nuestras pensiones con relación al IPC o nos tenemos que morir de pobreza y enfermedad. Joder, dona, recuerdo otros tiempos y no sé si acabaremos en la misma fosa común. Sea como sea la lección no la aprendimos y hemos vuelto a mantener una estrecha relación con la usura. Nos sonrieron y olvidamos que segundas partes nunca fueron buenas: Es la misma vida desordenada. Seguimos exhibiendo los mismos defectos y creyéndonos las mismas mentiras. Al menos, y según me cuentan, la sanidad volverá a ser universal y sin repago. Eso está bueno. Gracias.