Vacaciones sobrevaloradas.

"Estos son mis principios... si no les gustan, tengo otros". El enunciado no es mío, es de Marx, Groucho Marx, yo no tengo tanto talento (ni menos). Pero lo pueden firmar los políticos de sobrevaloradas vacaciones. En mis tiempos les llamábamos "chaqueteros", imagino que eso no cambió. Chaqueteros, la mayoría fanáticos del "irrepetible" desde que se escindieron del PP para extorsionarlos desde afuera y llevarles por el camino de la degradación del humano ser. Aunque sobrevaloradas las vacaciones, según Albertiño, a mí me vendrían de lujo dos semanas en una isla desierta con un libro, un sombrero de paja y nada más, ni comida hasta que dejara mi cuerpo como ese que se tira desde el acantilado al mar para anunciar un perfume. Ya me veo... (tirar se tiraría el doble) nadando y subiéndome al barco de la joven con un tipazo parecido al mío y tan guapa como yo, ay, perdón. Como están sobrevaloradas las vacaciones no me lean, no vaya a ser que su jefe tenga "pinchado" de soslayo, les localice y los llame para atender unos asuntos inaplazables. Ya me leerán, si ustedes en un descuido aparecen por aquí, dado que, de soslayo, como el voto en España (hasta que Albertiño y el fan del "irrepetible" ganen las elecciones y nos expongan a todos y todas a la muerte, la criminalización y la tortura innecesaria) es secreto y libre. En fin, hace calor y si me entretengo más no podré salir a pasear por Les Seniaes. (No me tomen en serio y pasen un día estupendo). Gracias.