viernes, 29 de agosto de 2025

Amor fingido.

Se comenta por los mentideros de El Pueblo de Patricia con mucha razón, diría, que las relaciones humanas son como los zapatos, si tienes que forzarlos no son de tu talla y si no son de tu talla no lo son y fin. "... y lo bueno fluye, encaja, acomoda y bendice como bendice el Señor Dios a los bendecidos del amor y de la vida". Así que por más que busques someter (a tus estándares y a tus expectativas) a tus zapatos, no andarás cómoda. Seguramente habrá, porque nunca dejará de haber, a quién no le duela las ampollas en los pies, como la metástasis en el corazón de tanto amar. ¿Se nos rompió el amor, como a la Jurado, de tanto usarlo? Los problemas del corazón son reveladores porque aparecen como consecuencia de una deuda. (Quien debe y no paga no debe nada). Una deuda no amortizada, como una promesa incumplida, se pueden convertir en un problema de complicada solución. No seas estúpida, vigila esa salud, paga lo que debes y evalúa la situación sin prisa, pero dile a tu corazón que estás viva, y que no tenga miedo dejar entrar a quien aún encaja en tu vida (la horma de tus zapatos). Sin olvidar que, a quien más nos cuesta amar es quien más lo necesita, y si digo necesita, digo necesitas. Necesitamos. De modo que tira esos zapatos y cumple tu promesa de amor, porque más vale andar descalzo que con amor fingido. Gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario