Los políticos: Uno dice algo inteligente y da qué pensar, y te anima a echar la mente a andar. Pero si dice lo mismo, muchas veces aparece el ruido y hasta luego. Uno no dice cosas inteligentes por mucho que hable. En la dosis apropiada todo es bueno, incluso lo malo para ir conociéndonos es bueno. Todo es bueno y es malo, y solamente el malquerer nos sepulta. Si acordamos llevarnos bien, ser genuinos, y la mejor educación por delante: ¿Qué hacemos andando caminos embarrados de incondicionales hundiéndonos en la indigencia? Saber elegir debe ser hábito, priorizando las necesidades y es todo. Todo si lo fuera, pero no lo es. Se aleja la ola de un mar dejando la arena mojada, el sol no calienta y el cielo en tiniebla. Es otoño y hace frío. Y cuando parecía que lo peor había pasado, la radio nos advierte de que no hay antibióticos para una bronquiolitis que llegó sin avisar. En este país, hay niños menores de dos años que tienen problemas respiratorios, el paracetamol no les baja la fiebre y hay que ingresarlos (las urgencias no dan abasto y los sanitarios en la fila del paro. Impresentable). Gracias.
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