Una vida clandestina.

Que no te distraiga de tus quehaceres una crítica en de soslayo. Sabes que me apasiona escribir y si no escribo muero. Tus quehaceres son tuyos, yo tengo los míos, y entre los míos hay uno tuyo que espero consideres como si fuera para tu padre. ¿Sigo siendo tu padre? Si lo fui, si me quisiste, si ahora no soy nada no es algo de lo que tengas que avergonzarte, tal vez no te merezco. Nunca dejaré de quererte. Si me permites cantarte las verdades a la cara te las cantaré (si no también). Mis cantares son verdades y no tienen cara "B" ni aplausos inmerecidos. Mis cantares son verdades como puños que salen del corazón y las tomas o las dejas, como las lentejas. Insisto, que no te distraiga de tus quehaceres una crítica en de soslayo. Haz lo que tengas que hacer, hazlo bien. Y si las complicaciones te desbordan tú pregunta... No le des vueltas: un libro tiene respuestas. Sé que lo sabes y que llevas semanas buscando el libro de autoayuda que mejor se adapte a tus intereses... Si tengo razón, y yo no soy de mucho equivocarme, has de considerar que los viejos apenas salimos de casa y si salimos nos gustan ver las cosas bien hechas. (Claro que hablo de blanco y en botella, amor, y de una rosa roja, por supuesto). Gracias.