"Si después de yo morir quisieran escribir mi biografía, no hay nada más sencillo. Tiene solo dos fechas -la de mi nacimiento y la de mi muerte. Entre una y otra todos los días son míos". (Fernando Pessoa). Como el poeta Pessoa, si después de yo morir... Yo escribo mi autobiografía cada día. Pero si una fidedigna, cuando les llegue el certificado de la autopsia a la Dama del síndrome de la interacción nula, y a la Dama que vela mis sueños (uy, cuánto tiempo...), y a la Dama que no me deja ir, y me conozcan de verdad y quisieran publicar mi historial médico de ciencia definición... Ay, mi vida será material de recreo en las escuelas. Si se enfoca la vida con una pizca de picardía y fe, se pueden llenar todos los días con embrollos que merecen ser escritos. Irresponsabilidades propias de quien espera una lección de vida que la salve mientras el cadáver baja y la soga sube. Y mucho más con interés. Historias que darían para escribir todos los días de una vida entre risas y no fiestas. Lo dejo que llego tarde. (Arrojen a la papelera los días de falsas interpretaciones que hacen daño a la salud y sean felices). Gracias.
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