Hoy fui a misa. En misa estaban las de siempre, supongo, menos el sacristán de las campanas que es nuevo en el cargo. Es tan viejo como tú o más. A los viejos nadie nos quiere. A misa van más mujeres que hombres. Eso ha de tener una explicación científica. Por algo será. Y sin embargo, a mi siempre se me dieron mejor las mujeres que los hombres. Hasta que Ian apareció en mi vida fui un mujeriego cien por cien. Donde estén las mujeres, si son amigas, que se quiten los hombres si son amigos o no. Viene al caso confesar que si alguna amiga me queda, y no digo que no, está en paradero desconocido. O me lee en silencio. O quedó al otro lado del muro si lo del muro fue algo serio. Flor de María: no temas, ese yanqui del muro y de tu ipat no puede ser peor que el gallego del plasma. Voy a ser claro contigo, si yo tuviera un ipat lo tiraba a la basura como tiro las botellas de albariño vacías... Y por plasma tengo una cataplasma. Cataplasma como remedio medicinal, ni de lejos cataplasma de plasta.
Hoy fui a misa a rezar por ti y por mí. Por ti porque tu iglesia se está cayendo a trozos y el maligno solo viene si lo provocas. Y por mí porque si no voy a misa no puedo ir al casino a tomar un vino y el pincho de tortilla. Es la realidad del pueblo de Patricia. Se pudiera pensar que vaya y dale con que el pueblo es de Patricia y no mío. Si te soy sincero, mío fue un día, pero no sé cuando dejó de ser. En mi impagable soledad alguien me juega una mala pasada. O vuelvo a salir de casa o nadie vendrá a buscarme... Y lo peor, que mi esposa seguirá siendo mi viuda.
Flor de María: hoy me apetece tomar una copa de vino a tu salud y a la mía mirando hacia el oeste. De albariño, naturalmente, antes de que Rajoy le de por exportar toda la producción a su amigo el yanqui del muro y de tu ipat que ya estás tardando. Te quiero, que sepas que si las cosas van a peor siempre nos quedará París. Al menos, no dejes de intentar ser feliz... Recuerdos a tu vecino el asesino en serie. Gracias... (de nada).
Jajajajaja me hiciste reír (en silencio porque es domingo y no amanece todavía). Estaba a punto de mandar al carajo el iPad. Él no es como tu ordenador que te ordena lo que escribas. Él escribe lo que se le da su real gana jajaja. (luego tengo que andar borrando malos entendidos).
ResponderEliminar¿No te digo? Me haces reír cuando menos lo espero. Ojalá tu dios te oiga. Ando requiriendo una ayudadita, mira que el diablo ya se canso de mi jaja.
Y deja de decir que no tienes amigas. Tienes muchas pero son como tú, silenciosas.
Hoy me dieron ganas de quererte un poquito más (aunque te ruborices).
Muy buenos que digo buenos, excelentes amaneceres.
Y muy buenas, que si son amigas, son las mejores. Gracias. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Escribes raro y bien, asturiano de Valencia. Un abrazo.
ResponderEliminarQuien no escribe raro, lo hace como todos: mal.
Qué alegría viejo amigo. De un escritor de talento reconocido las palabras saben a Gloria, como los churros de Gloria que saben a Gloria. ¿Recuerdas? Gracias.
ResponderEliminarSalud.