A esos que van por las calles mirando al cielo, ignoran que si miraran al suelo y a los lados, aunque fuera de soslayo, verían lo que no ven mirando al cielo: ¡miracielos!. "Miracielos" le llamaban en mi pueblo al que repartía cartas del banco. Imaginan un repartidor de cartas bancarias: recibos de la luz, del agua, los muertos, descubiertos o etcétera. Ganamos con lo digital y perdimos con todo lo demás, incluidos puestos de trabajo históricos. Y el cartero ya no llama dos veces, pasa cuando pasa y como no estés atento al timbre (yo lo estoy, pero voy lento a abrir la puerta), lleva una tableta y enseguida "no está en casa" y no importa que antes de irse le des los buenos días que ya pulsó "no está en casa" y mañana a la estafeta de correos por la carta certificada. Estaba en casa, joder, pero voy lento y mañana tendré que darle a Patricia un justificante firmado con mi DNI confirmando que no estaba en casa, no vaya a ser que la próxima carta a mi nombre pase de largo... Vuelvo a invitar, y no me canso, volver a la escuela y empezar por los ejemplos, sin olvidar, por todos los medios posibles el significado de una palabra: "urbanidad". (Nos hacemos las cosas muy difíciles y a mí me perturba la ansiedad y me mata el no saber). Gracias.
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