"Hoy tengo un día de esos en que mandaría todo a hacer puñetas, incluso firmaría con placer el acta de mi rendición. Diría: Adiós a todo eso como graves, o incluso en plan asceta me subiría a una columna en el desierto como San Simón, o como Onetti, acaso intentaría no dejar jamás el lecho, o pillaría el primer vuelo al Himalaya para hacerme zen. Pero, maldita sea, cómo dar el salto de lo dicho al hecho, contigo ahí, repitiéndome: Amor mío, ven. Solo por ti sigo aquí". (Luis Eduardo Aute).
En medio de la tempestad soñé que llegaría la calma. Si llegó fue tarde. La vida tiene guasa y el que manda ríe y los demás lloran. Pero ocurre que hoy, como Aute, es un día de esos de mandar todo a hacer puñetas, incluso firmar con placer el acta de mi rendición, y, a riesgo de que me consideren más orate de lo que estoy, no pienso mostrarme como soy para sanar un dolor de corazón. Mi propósito es seguir con los pies en el suelo masticando la filosofía carpe diem. Yo quiero, tú quieres, él quiere. Todos queremos lo mismo: Llegar a fin de mes y la salud que no falte. (El hombre del tiempo para hoy anuncia lluvia y acertará porque ya está lloviendo ... El hombre del tiempo, los políticos y el burro de la flauta, algún día aciertan). Gracias.
Hola, aquí ando.
ResponderEliminarBuenas madrugadas 🙋👋🌧️
¿Estás segura? Te quiero. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Si,guapo abuelo.
EliminarTe quiero más