sábado, 16 de febrero de 2019

El campo de las infinitas posibilidades.

No me llames Casado, ni Rivera, ni Abascal, llámame Aznar.

Lo sabía y no se lo oculté a mi esposa: "El presidente Sánchez adelantará las elecciones generales al 28 de abril. Lo bueno que los rojos ganaremos el cielo, y lo malo que las tres hijas de Aznar quedarán cantando los tangos más tristes de Gardel".

Efectivamente, en nada cambiaremos, si alguien creía que saldríamos de la pobreza no, al contrario, seremos más pobres y dependientes, pero no independientes. Escaño a arriba, escaño a abajo, todo seguirá igual: Al tiempo. No obstante, y como es viernes, iré al mercado y sabré más. Es pronto para comprar disculpas, pero lo que no sepan los mercaderes no lo sabe Tezanos, y ya es decir. Por cierto, Puig, Ximo Puig, presidente del Conssel, me llamó pocos minutos antes de saber el día de las elecciones y me preguntó: "¿y yo qué? Le dije que también: "Tú, adelanta las elecciones al 28 de abril o te quedarás compuesto y sin novia, sin encabezar la lista del PSPV-PSOE a la Generalitat, quiero decir". Según mis fuentes cercanas a Moncloa me confirman que Sánchez pretende refundar el PSOE para las elecciones municipales, autonómicas y europeas que se celebrarán el 26 de mayo y que los barones... ay, y las baronesas. -¿Estás seguro? -Vaya que sí: Son muchos los que cada día no salen de casa sin leer en de soslayo su estado de ánimo y alguna, incluso, lo que tiene que hacer. Gracias.

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