Una amargura.
Mis primeros años inolvidables viví
junto a la playa,
en ese mar somero y manso,
ancho y grande.
Y cada vez que ante mí
recién florida la vida
se presenta,
suspiras, mi corazón, por el mismo deseo:
¡Ojalá volviera a vivir allí!
Mi suerte es una sola, mi gracia es esta,
no he conocido otra:
Un mar en mis adentros como un lago grande
dulcemente extendido.
¡Y ahí está!, el sueño me trajo
tan cerca otra vez
ese mar somero y manso,
ancho y grande.
Mas a mí, ¡ay!, una amargura me amargaba,
una amargura grande,
¡y tú no endulzaste
aquella primera pena, mi playa apacible!
Qué tempestad se alzaba en mi interior
y qué vendaval,
que no arrullaste y no amainaste,
mi playa apacible.
Una amargura taciturna, una amargura inexplicable,
una amargura grande,
la amargura que indeleble se halla en el paraíso
de nuestros primeros años junto a la playa.
Kostis Palamas, poeta, falleció el 27 de febrero de 1943.
Muy bueno...
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